El poeta Victoriano Crémer (abuelo del autor), dice de este libro: "El viajero o el libro arrastra y descubre, por entre la arboleda surreal, el árbol claro, estricto, perfectamente dibujado contra un horizonte de perros."
El viajero sospechoso es un drama sobre la embriaguez. Pudiera ser que exija, como dice Crémer en su carta, la invención del alma o el concurso de un acompañante. Un perro fiel.