De cada uno de los versos que componen Teorema, emerge un espíritu de búsqueda, una necesidad de respuesta, un intento de solucionar el problema. Teorema es un juego lógico que se convierte en viaje; un viaje a través de las tinieblas de lo intangible, un viaje hacía una luz que explica y calma. Una solución a la que tan sólo se llega con la síntesis de todos los elementos. La razón, la pasión, la inquietud, el amor, el miedo... Todos ellos en busca de una misma verdad.